Los comedones son un problema común de la piel que afecta a muchas personas en todo el mundo. No te preocupes, aquí en Ninapriorat te explicaremos qué son, por qué salen y qué puedes hacer para decirles adiós.
Si estás cansado de lidiar con estos molestos comedones, quédate con nosotros y descubre cómo cuidar tu rostro de la mejor manera para evitarlos.
¿Qué son comedones?
Los comedones son pequeñas imperfecciones que aparecen en la piel, especialmente en la cara. A menudo los llamamos “puntos negros” o “puntos blancos”. Son esencialmente bloqueos en los poros de la piel, causados por una combinación de aceite, células muertas y suciedad.
A pesar de su apariencia, no son suciedad real, ¡así que no te preocupes por eso! Los comedones pueden ser un fastidio, pero entender por qué ocurren es el primer paso para mantener tu piel lo más saludable posible.
¿Cuáles son sus causas?
¡Buena pregunta! Los comedones pueden tener varias causas, pero en su mayoría están relacionados con la producción excesiva de grasa en la piel y la acumulación de células muertas en los poros.
Cuando las glándulas sebáceas producen más aceite de lo necesario, este aceite puede obstruir los poros, atrapando las células muertas de la piel y creando un ambiente perfecto para la formación de comedones.
Además, ciertos factores como la genética, cambios hormonales, el uso de productos de cuidado de la piel no adecuados para tu tipo de piel e incluso la exposición a la contaminación ambiental pueden contribuir a la aparición de comedones.
Es importante conocer estas causas para poder tomar medidas y reducir su aparición en tu piel.
Tipos de comedones
Existen dos tipos principales de comedón: los puntos negros y los puntos blancos. Aquí te los explico:
Puntos Negros
Este es un comedon abierto. Se llaman así debido a su apariencia, que puede parecer como pequeños puntos oscuros en la superficie de la piel.
Los puntos negros son el resultado de poros obstruidos con sebo, células muertas y otras impurezas. La obstrucción en el poro está en contacto con el aire, lo que provoca que se oxide y se vuelva de color oscuro.
Puntos Blancos
También conocidos como comedones cerrados, estos son más difíciles de ver porque la obstrucción en el poro no está en contacto directo con el aire. Por lo tanto, permanecen de color blanco o piel.
Los puntos blancos pueden ser más difíciles de tratar, ya que la obstrucción no se despeja tan fácilmente como en los puntos negros.
Ambos tipos de comedones pueden ser molestos, pero con el enfoque adecuado en el cuidado de la piel, ¡puedes mantenerlos a raya! Sigue leyendo para obtener consejos sobre cómo manejarlos.
Tratamientos estéticos para eliminarlos
Estos son algunos tratamientos estéticos que pueden ayudar a eliminar los comedones:
- Limpieza facial: Este tratamiento es realizado por profesionales en un salón de belleza o clínica dermatológica. Utilizan herramientas especiales para extraer manualmente los comedones de los poros obstruidos, ayudando a limpiar la piel y prevenir futuros brotes.
- Peelings químicos: Los peelings químicos implican la aplicación de una solución ácida en la piel, que ayuda a exfoliar las capas superiores y destapar los poros. Esto puede mejorar la apariencia de la piel y reducir la aparición de comedones.
- Microdermoabrasión: En este procedimiento, se usa un dispositivo especial para exfoliar suavemente la piel y eliminar las células muertas. Esto puede ayudar a destapar los poros y mejorar la textura de la piel.
- Láser y terapias de luz: Algunos tipos de láser y terapias de luz, como el láser fraccional y la terapia fotodinámica, pueden ayudar a reducir los comedones al enfocarse en las glándulas sebáceas y los poros obstruidos.
- Tratamientos con ácido retinoico: Disponible en formulaciones de venta con receta, el ácido retinoico es conocido por su capacidad para destapar los poros y promover la renovación celular. Puede ser efectivo para tratar comedones persistentes.
- Tratamientos con ácido salicílico: Algunos spas y clínicas dermatológicas ofrecen tratamientos faciales que incluyen ácido salicílico, un ingrediente que ayuda a exfoliar y destapar los poros.
- Peeling con láser: Los peelings láser de baja intensidad pueden ayudar a mejorar la apariencia de la piel y reducir la obstrucción de los poros, contribuyendo a la eliminación de comedones.
Recuerda que es fundamental hablar con un dermatólogo antes de someterte a cualquier tratamiento estético. Un profesional podrá evaluar tu piel y recomendarte la mejor opción según tus necesidades y tipo de piel.
consejos para prevenir los comedones en la cara
Aquí tienes algunos consejos para prevenir la aparición de comedones en tu rostro:
- Limpieza suave pero regular: Limpia tu cara dos veces al día con un limpiador suave para eliminar el exceso de grasa, células muertas y suciedad sin irritar la piel.
- Productos no comedogénicos: Utiliza productos para el cuidado de la piel que estén etiquetados como “no comedogénicos” o “libres de aceite” para reducir las posibilidades de obstrucción de los poros
- Hidratación adecuada: Aunque parezca contradictorio, mantener la piel hidratada es esencial. Opta por una crema hidratante ligera y libre de aceites para mantener el equilibrio de humedad en tu piel.
- Exfoliación regular: Exfolia suavemente tu piel una o dos veces por semana para eliminar las células muertas y prevenir la obstrucción de los poros. Evita la exfoliación excesiva, ya que puede irritar la piel.
- Protector solar diario: Usa protector solar a diario, incluso en días nublados. Esto protegerá tu piel de los daños del sol y ayudará a prevenir la acumulación de células muertas.
- Evita tocarte la cara: Evita tocar tu rostro con las manos sucias, puesto que esto puede transferir aceite y bacterias a la piel, contribuyendo a la obstrucción de los poros.
- Maquillaje y limpieza adecuados: Si utilizas maquillaje, asegúrate de retirarlo completamente al final del día con un desmaquillante suave. Opta por maquillaje no comedogénico y limpia tus brochas regularmente.
- Dieta equilibrada: Una dieta rica en frutas, verduras y agua puede contribuir a una piel más saludable. Evita el exceso de alimentos grasos y procesados.
- Controla el estrés: El estrés puede desencadenar la producción de más grasa en la piel. Encuentra formas de manejar el estrés, como practicar yoga, meditación o hacer ejercicio.
- No exprimir: Resistir la tentación de exprimir los comedones. Esto puede llevar a la inflamación y cicatrices.
Recuerda que cada piel es diferente, así que es posible que necesites ajustar tu rutina de cuidado de la piel según tus necesidades específicas. Si tienes dificultades persistentes con los comedones, un dermatólogo puede brindarte orientación y recomendaciones personalizadas. ¡Cuidar tu piel es un paso importante hacia una apariencia radiante y saludable!
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